Muchos cosméticos están etiquetados con términos como natural, ecológico, bio o herbal. Sin embargo, estos son a menudo solo términos de marketing utilizados por las empresas para tratar de vender sus productos.
El problema reside en que actualmente no hay regulaciones gubernamentales para el etiquetado natural de cosméticos. En consecuencia, las compañías de cosméticos pueden utilizar dichos términos con libertad.
Solo porque un envase se identifique como natural, ecológico, bio o herbal, no significa necesariamente que los productos realmente contengan ingredientes naturales y orgánicos.
Esto se conoce como lavado verde o más conocido en inglés como greenwashing.
En este entorno es donde la certificación natural y ecológica tiene una gran importancia.
Son muchas las empresas que se definen como naturales cuando realmente se encuentran muy lejos de serlo.
Entonces, ¿cómo se puede estar seguro de que un producto es realmente natural u ecológico?
La única forma de estar 100% seguro es verificar si tiene certificación natural u ecológica.
Debido a la carencia de una legislación, son los organismos de certificación quienes ofrecen dichos avales a cambio de unos requisitos indispensables.
Sin embargo, hay algunas compañías de cosméticos realmente maravillosas, muy pequeñas, que producen productos naturales y ecológicos sorprendentes que no tengan certificaciones naturales y ecológicas en sus productos.
Esto no significa que no se pueda confiar en sus productos. Es solo que es posible que todavía no tenga los recursos o el dinero para poder pagar la certificación.
No obstante, las grandes empresas sí cuentan con los medios y recursos para obtener certificaciones naturales y ecológicas, por ello, ante un cosmético de una gran empresa que afirma ser natural, ecológica, a base de hierbas o de otro tipo, pero que no tiene ninguna certificación natural u ecológica, lo más probable es que no sea un producto natural.
Otra forma de asegurarse es consultar la lista de ingredientes. Debido a la normativa actual todos los cosméticos deben contener el INCI (International Nomenclature of Cosmetic Ingredients) donde los ingredientes son enumerados de mayor a menor cantidad y con sus nombres botánicos en latín o inglés.
No obstante, este detalle hace que en la mayoría de los casos sea imposible descifrar lo que compone el cosmético.
Requisitos básicos de certificación natural y ecológica
Es importante destacar que la cosmética natural y la ecológica, a pesar de que en múltiples ocasiones se utilicen como sinónimos, no son lo mismo.
Mientras que en los cosméticos certificados como naturales no hace falta un mínimo de ingredientes procedentes de la agricultura ecológica, la mayoría de las certificaciones ecológicas exigen que al menos el 90% de los ingredientes vegetales lo sean.
Este hecho es importante ya que dentro de los productos certificados como naturales se pueden utilizar pesticidas y otros químicos a la hora de cultivar la planta.
Cada organismo de certificación tiene su propio conjunto de pautas en cuanto a lo que buscan para certificar un producto como natural u ecológicos. Sin embargo, la mayoría exigen los mismos requisitos y lo que principalmente les diferencia es la cantidad mínima de ingredientes ecológicamente certificados para la obtención del certificado.
Entre los principales certificados destacan:
- NATRUE: que se aplica a la elección de materias primas y productos cosméticos terminados. Está reservado para aquellos con un alto nivel de ingredientes naturales y ecológicos.
- COSMOS: es la certificación más popular para cosméticos. Las principales certificadoras europeas se juntaron para establecer conjuntamente unos criterios y pautas a seguir (BDIH, COSMEBIO, ECOCERT, ICEA y SOIL ASOCIATION). Define las reglas a seguir en términos de abastecimiento, fabricación, comercialización y control.
- Etiqueta ecológica de la UE (hoja verde): promueve una economía circular y aboga por la fabricación de productos reciclables y sostenibles. Estos deben cumplir con reglas estrictas desde la extracción de materias primas hasta la producción, distribución y su eliminación.
- Norma ISO16128: define las principales pautas para que un producto cosmético cumpla con criterios naturales y ecológicos.